Un llamado a superar las desigualdades y las diferencias presentes en la sociedad actual, que permita recobrar el verdadero “sentido de la vida”, respetando la felicidad de cada uno de sus integrantes formuló el obispo de Talca, Horacio Valenzuela, ante sobre siete mil personas que colmaron las dependencias de la medialuna de Curicó para celebrar la Asunción de la Virgen María, actividad que desde el año 1989 congrega a feligreses de diferentes puntos de la región y que por primera vez se llevó a cabo en la ciudad puerta norte del Maule.
La extensa jornada comenzó a las 09.30 horas con una peregrinación que tuvo su punto de partida la Plaza de Armas de Curicó, lugar desde donde las delegaciones de las 53 parroquias de la diócesis se trasladaron hacia la medialuna, el lugar escogido para llevar a cabo la misa central. Cabe mencionar que el masivo encuentro diocesano no se llevó a cabo el año recién pasado, debido a las secuelas que dejó en la población el terremoto ocurrido a fines de febrero.
La extensa jornada comenzó a las 09.30 horas con una peregrinación que tuvo su punto de partida la Plaza de Armas de Curicó, lugar desde donde las delegaciones de las 53 parroquias de la diócesis se trasladaron hacia la medialuna, el lugar escogido para llevar a cabo la misa central. Cabe mencionar que el masivo encuentro diocesano no se llevó a cabo el año recién pasado, debido a las secuelas que dejó en la población el terremoto ocurrido a fines de febrero.
